Sevilla ha acogido la celebración del I Congreso Nacional de Educación Emocional, un evento que ha estado centrado en una educación de tercera generación en pro de la salud mental de los alumnos y alumnas.
Entre las conclusiones destaca que una educación basada en el respeto y los buenos tratos repara y previene problemas de salud mental, para lo que se requieren espacios y procesos de autocuidado para los docentes.
Al encuentro han acudido 400 asistentes, entre profesionales de diversos ámbitos, educadores, padres y alumnos, que han participado en un Congreso en el que han expuesto ponencias especializadas con un aval científico e innovador y llenas de propuestas y contenidos que necesitan los profesionales para comprender y entender lo que está sucediendo en nuestra sociedad en relación con la salud mental.
En el siguiente decálogo se recogen las principales conclusiones de este primer congreso:
- Se necesitan espacios y procesos de autocuidado para los y las docentes
- La educación emocional no es un contenido curricular más, es una forma de entender la escuela y los procesos de aprendizaje
- Es importante recuperar la mirada humanista e integral de la enseñanza en la que se educada desde lo mental, emocional, corporal y espiritual
- Las competencias espirituales no tienen por qué ir vinculadas a la religión y son fundamentales para el fortalecimiento de la seguridad personal
- Una educación basada en el respeto y los buenos tratos, repara y previene problemas de salud mental
- La ciencia, por primera vez, avala todo lo que la educación emocional lleva planteando años
- La educación emocional es un arma de construcción masiva
- La relación entre el intestino, cerebro y emociones es básico y requiere de una educación alimenticia desde pequeños
- La forma de respirar también se acompasa, un docente tranquilo que respira, es capaz de calmar a su alumnado.
Lo más importante han sido las exposiciones y los debates que han ofrecido los ponentes, que han dado una visión que permite dar una respuesta actual enfocada a los centros educativos y sus profesionales, desde las perspectivas del apego y la escuela, trauma y educación, epigenética y educación emocional, neurobiología y educación, mindfulness y aprendizaje, pedagogía sistémica o antropología educativa.
El Congreso ha partido de una realidad como la situación actual de salud mental en nuestra sociedad, que está al límite con episodios extremos que recogen a diario los medios de comunicación y con una aceleración de los problemas relacionados con este ámbito y el equilibrio emocional, para lo que se considera que la educación tiene un papel esencial.
Sin embargo, según se ha puesto de manifiesto en este Congreso, la burocratización, la falta de formación y de recursos o la ratio, entre otras dificultades del sistema educativo, han provocado que los docentes estén cansados y desorientados y no puedan cubrir las necesidades emocionales del alumnado y las familias.
No obstante, los constantes avances científicos en el conocimiento del cuerpo y del comportamiento humano han permitido actualizar nuestra forma de analizar los trastornos, las enfermedades, la salud, las relaciones o el comportamiento.
Entre los 400 asistentes han acudido maestros de primaria, de infantil, profesores de secundaria y formación profesional, de conservatorio, de universidad, de personas adultas, orientadoras escolares, técnicos de infantil o psicólogos, además de familiares que viven los problemas de la salud mental muy cerca.
En este encuentro se ha hecho entrega de un galardón por su extensa trayectoria profesional a los siguientes premiados: Vandita García, Begoña Ibarrola, Rafael Bisquerra, Antonio Sánchez, Gorka Saitua, Pablo Peralta, Antonio Soto, Margarita Acosta, José Luis Gonzalo y Borja Uruñuela.
La entrenadora de emociones y formadora sevillana Mari Carmen Díaz Cadenas ha sido la Maestra de Ceremonias encargada de presentar a cada uno de los ponentes y demás participantes con detalles personales de cada uno de ellos. Además, la ilustradora onubense Desirée Acevedo ha ido dibujando en tiempo real las imágenes que han representado este I Congreso Nacional.
En este Congreso de Educación Emocional también ha habido un espacio práctico con talleres que han abordado la educación emocional fuera del ámbito educativo: familia, deporte o sanidad, empresa,… entre otros.
El evento ha sido organizado por Asedem, la Asociación Española de Educación Emocional, en colaboración con el Departamento de Psicología y Antropología básica de la Universidad Pablo de Olavide, y se ha desarrollado durante todo este fin de semana en el Paraninfo de la Pablo de Olavide, con profesionales de vanguardia que son un referente en su ámbito como los ponentes Alma Serra, Rafael Bisquerra, Nazareth Castellanos, Anna Forés, Begoña Ibarrola, Esperanza Meseguer, José A. Sánchez Medina, Antonio Sánchez Román y los talleristas Leticia Garcés, Carlos Hue, Andrés París y Ana Peinado.
En la clausura han intervenido Francisco Javier Amaya Flores, subdirector general de Cooperación Territorial e Innovación Educativa del Ministerio de Educación y Formación Profesional; Silvia Pozo, delegada de Consumo y Salud del Ayuntamiento de Sevilla; Laura López de la Cruz, vicerrectora de Relaciones Institucionales y Fundaciones de la Universidad Pablo de la Olavide; y, mediante un video, la consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Patricia del Pozo.