El director de cine chileno Fernando Guzzoni ha presentado este martes en el Festival de Huelva su cuarto largometraje, ‘Blanquita’ (2022), una coproducción entre Chile, México, Luxemburgo, Francia y Polonia que viene de obtener el Premio al Mejor Guión en la Sección Orizzonti del Festival de Cine de Venecia. Guzzoni se inspira en el caso real de una red de políticos pederastas
Esta película, basada en hechos reales y un caso “muy mediatizado” en Chile, plantea la idea de cómo la justicia o los poderes construyen “ciudadanos de primera o segunda categorías”, una paradoja en la que hay “una justicia para algunos y cómo opera para las personas que no están dentro de los círculos de poder”, asegura el director.
Por otra parte, ha querido destacar el papel del cine chileno, “no solo en Latinoamérica, sino en el mundo”. Asegura que hay “diversidad de miradas de directoras y directores”. Asimismo, se siente “muy orgulloso” de formar parte de ese grupo que ha surgido y que sigue permanentemente visibilizando “distintas temáticas con exploraciones formales y discursivas muy diversas”.
La película, que cuenta con un elenco de actores capitaneado por Laura López, Alejandro Goic y Amparo Noguera, bucea en la historia de Blanca, una residente de un hogar de acogida de 18 años que es testigo clave de un escándalo que involucra a niños, políticos y hombres poderosos que participan en fiestas sexuales. Sin embargo, cuantas más preguntas se hacen, menos claro se vuelve exactamente cuál es el papel de Blanca en el escándalo.
Con su primer largometraje de ficción, ‘Carne de perro’ (2012), Guzzoni obtuvo reconocimiento internacional tras su exitoso paso por Nuevos Directores del Festival de San Sebastián, un certamen en el que participó en su Sección Oficial con su segundo largometraje, ‘Jesús’ (2016). Guzzoni estrenó en 2008 su primer largometraje documental, ‘La Colorina’, en la competición oficial de la Des Festival Films Du Monde en Montreal, Canadá. La película participó más de 20 festivales internacionales de cine como BAFICI, Monterrey, Cartagena de Indias y Docúpolis entre otros y resultó premiada como Mejor Película en el Festival de Cine de Trieste, Italia. También permitió a Guzzoni llevarse el Premio a Mejor Director en SANFIC.