En una época como la actual en la que la Filosofía, madre de las Humanidades, está cada vez más relegada en las aulas y su utilidad se cuestiona en la presencia curricular de Secundaria y Bachillerato, son muchos los docentes que siguen agarrándose a este árbol de la sabiduría para sembrar en su alumnado la semilla del pensamiento.
Desde esta filosofía (nunca mejor dicho), y con motivo de la celebración del Día Mundial de la Filosofía, celebrado el pasado 18 de noviembre, los alumnos de 2º de Bachillerato del IES Aguadulce de Almería celebraron la clase de Historia de la Filosofía en los exteriores del centro.

Como explica a El Recreo Diario la profesora Marisa Molina Caba, la actividad consistió en que les trajo unos fragmentos de distintos diálogos platónicos con el fin de que «reflexionen y debatan en pequeños grupos durante unos minutos, compartiendo después sus ideas con los demás». De esta manera, estos alumnos pudieron hablar sobre la bondad, la amistad, el amor, la educación de los gobernantes, el miedo a la muerte, el aprendizaje y la relación entre el alma y el cuerpo.
Así lo resume Marisa Molina: «Ha sido una clase peripatética, como realizaban los seguidores de Aristóteles en la antigua Grecia, que ha interesado mucho a los alumnos y con la que han disfrutado de una jornada especial, saliendo del aula para dialogar y pensar al aire libre». En este sentido, la profesora argumenta que con esta actividad «se quiere visibilizar la importancia del pensamiento crítico y libre, el diálogo sosegado y la reflexión sobre los grandes temas humanos», así como fomentar y trabajar «la libertad para hablar y la empatía para escuchar y construir acuerdos». Porque, como ella misma recuerda, «como dijo Sócrates, una vida sin filosofar no merece ser vivida».
El Día Mundial de la Filosofía fue instaurado por la Unesco y se celebra desde el año 2005 cada tercer jueves de noviembre. Pretende reconocer la importancia del pensamiento crítico y el diálogo razonado como fundamentos para el reconocimiento de la diversidad humana y la convivencia pacífica.